Primer capítulo de nuestra disección del cartel del Primavera Sound Festival 2018
El Primavera Sound es un festival inabarcable. Casi doscientos artistas se reparten por el Parc del Fòrum durante tres jornadas maratonianas de distancias imposibles, locura horaria y transversalidad genérica y estilística; además por una preliminar, de entrada gratuita, no menos relevante. Pero también por la ciudad de Barcelona desde el martes hasta el domingo, un día que cada año, como el miércoles, parece crecer un poco más.
En su cartel encontramos de todo, desde bandas emergentes a grandes cabezas consolidados de diversísimos rangos, pero también todos los géneros posibles, desde el metal en vertientes tan agresivas como el sludge hasta el techno oscuro pasando por el indie rock, la vanguardia sonora, el pop, la electrónica, el trap, el hip hop, el r&b…
Y es imposible conocer cada una de las bandas con las que siempre, de algún modo u otro, terminan sorprendiendo. Por eso, y a contrarreloj pues todos los meses que tengamos nos parecen pocos para preparar en condiciones el Primavera Sound, hemos decidido volcar prácticamente todo lo que se nos ha venido a la cabeza de todos y cada uno de los artistas que pueblan su cartel e incluir los temas más escuchados de bandas que tampoco nosotros conocemos en una playlist con 722 canciones y más de 55 horas de música.
Para perdernos juntos por el cartel.
10 pilares para seguir afianzando la identidad del Primavera Sound
Además, nos lanzamos con la primera de las disecciones que haremos del cartel en los próximos meses y escogemos diez artistas que encarnan a la perfección lo que podríamos llamar el «sello Primavera». Una marca que el festival ha ido definiendo con maestría y con mimo durante sus diecisiete ediciones, apostando por el pasado más brillante, el presente más urgente y el futuro más amplio por delante. Una marca que cada vez con más ahínco traducen a su sello, El Segell del Primavera, y a su faceta como promotora de conciertos, responsable de algunas de las giras imprescindibles de cada año. Estos son, para nosotros, los 10 artistas del cartel e este año que representan la identidad del Primavera Sound y que han ayudado a cimentarla:
- Four Tet: Lo especial de traer en 2017 al Four Tet de New Energy, uno renovado y más pendiente de reforzar y encapsular sus distintas virtudes, es que sea un live. ¿Cuándo hizo Four Tet su último live en nuestro país? ¿Ha hecho Four Tet algún live en nuestro país? Pues eso. El Primavera Sound vuelve a ofrecer una experiencia única.
- Nils Frahm: Un poco como promete ser la que nos brinde el genial productor alemán, ambient clasicista con una demoledora emocionalidad melódica que esta vez promete estar más enfocado al baile y a otras dimensiones más musculares, más corpóreas. No, no será en el Auditori, ya lo confirmó Gabi Ruiz, así que preferimos imaginarnos que será más bien un aquelarre electrónico.
- Charlotte Gainsbourg: ¿Cuántos festivales se han siquiera planteado a Charlotte Gainsbourg para sus carteles? La también actriz y musa de von Trier ha sacado uno de los mejores discos del año de la mano de SebastiAn, productor de Kavinsky, entre retrosynth, poesía melancólica, elegías y oscuridad, y ¿por qué no darle el lugar que se merece en un festival? Primavera se apunta el tanto.
- Jane Birkin: Y ya que lo hace, cierra el círculo de homenaje al apellido Gainsbourg y trae también a su madre, la esposa del icono de la canción (y de la socialité en general) francesa Serge Gainsbourg. Levantará junto a una sinfónica de cincuenta músicos el resultado de la pleitesía musical que le rindió al que fue uno de sus más célebres compañeros de viaje y al repertorio que dieron a luz juntos, un disco que el año pasado editaba Parlophone. Alto nivel.
- Ty Segall: La última vez que la bestia parda del garage actuó en el Primavera Sound será siempre recordada por el fan, un tal Manny, que se subió a cantar y a liarla al escenario. Bueno, y por crowdsurfings, salvajismo e invasiones de escenario. No hay más preguntas.
- Migos: El Primavera abre camino. Y como tal es uno de los primeros festivales de Europa (y a veces hasta del mundo) en atreverse a programar en sus cabeceras nuevos estilos que han llegado desde abajo y que a veces cuesta creer como válidos para encabezar un festival. El Primavera ya dio una lección de programar pop electrónico y r&b en su tipo más grande el año pasado, y antes la había dado con el hip hop o con el metal. Este año ha sido el trap. De valentías como esta (que tampoco es tan valiente: Migos acaban de publicar una barrabasada de álbum) se hacen los cimientos del sello Primavera.
- Jon Hopkins: Ya avisaba la nota de prensa del festival de que este año una de las partes importantes del Primavera Sound era bailar. Y es que realmente la vertiente electrónica del cartel esconde alguna de las mejores sorpresas. Hemos mencionado ya varias, y una más sería Jon Hopkins en formato live. Por una razón parecida a la de Four Tet, porque se prodiga poco en esta versión (aunque sí algo más), pero también porque su música es un doctorado en la universidad de tu propia mente. Si el Primavera promete baile, el techno crudo y desollador de Hopkins probablemente nos haga arder al abrigo desnudo de la noche.
- Oneohtrix Point Never: Otro para hacer bailar al cerebro tanto como a los músculos, otro transgresor sonoro, otro violador de mentes, Oneohtrix Point Never siempre es uno de los nombres que hacen un cartel. Con enjundia propia, un cabeza tapado, uno de los ideólogos en la sombra, en su propia sombra, de algunos de los pasos más aventurados de la música en los últimos años, desde el trap al r&b, al pop electrónico, a resucitar a Vangelis con magia negra. Alquimia en manos de un loco.
- Lorde: El mejor disco del año 2017. Con una espléndida unanimidad, además. Una obra maestra atemporal que además retrata con precisión quirúrgica a la generación a la que pertenece. Un disco que cumple además otra profecía de David Bowie, que vio en Lorde el futuro del pop. Está aquí, brillando delante de nuestros ojos. El drama, el trauma, el jodido melodrama. Primavera Sound no podía perdérselo.
- Beach House: el dúo estadounidense vuelve al Primavera Sound, sí, otra vez y ya van cuatro. Debutaron en el Club en 2009 y han presentado en el festival todos sus discos desde Teen Dream, y suponemos que volverán a hacerlo, presentar nuevo trabajo, para no fallar a una de las tradiciones más evocadoramente bellas del festival de Barcelona: perderse en la noche entre la brumosa oniria inclasificable de la quintaesencia del dream pop: Beach House.
