La música celebra tener a Sidonie

Crónica del primero de los dos llenazos consecutivos de la banda barcelonesa en el Ochoymedio de Madrid


La última vez que Sidonie tocaron en Madrid lo hacían cerrando la gira de un disco que no pasará a la historia como el más laureado de la banda de Barcelona. Entre aquel concierto en La Riviera, bastante rasito, y el de el jueves en el Ochoymedio, por suerte, hay un abismo. Y no solo temporal y circunstancial, también en actitud.

Con nuevo disco bajo el brazo, El Peor Grupo Del Mundo, Sidonie parecen haber rejuvenecido por gracia de los kilómetros y de reírse de si mismos, y salen al escenario demostrando el amor que sienten por su público, motor indispensable de toda carrera artística, con ‘Os Queremos’ y ‘Nuestro Baile Del Viernes’, que caldea rápido el ambiente tirando de bailonga nostalgia.

https://www.instagram.com/p/BODmXfogpOe/

Inciden en ella a través de la magnífica progresión de ‘Costa Azul’ y ya nos han atrapado a todos. O casi. Faltaba para terminar de lograrlo del todo un paso maestro que sí supieron dar. Ahí, bien arriba, se acogen al sintetizador y descuelgan las notas de ‘Sierra Y Canadá’. Me detengo aquí para decir que, si pudiera juzgar el concierto por este pequeño bloque de cuatro temas, difícilmente bajaría del sobresaliente. El riesgo de colar el hit homónimo del penúltimo disco, tan (injustamente) criticado, empezaba a hacerme entender que Sidonie pueden haber llegado a trascender sus propias canciones convirtiéndose en un verdadero clásico nacional, capaces de grandes cosas y de cosas peores pero siempre abrigados por un indiscutible savoir-faire.

A partir de aquí decidieron descargar la práctica totalidad de EPGDM, con buenas canciones como ‘Siglo XX’ o ‘El Peor Grupo Del Mundo’ y otras más olvidables (‘Fundido A Negro’, ‘Atragantarnos’), e intercalarla inteligentemente con momentos álgidos de su discografía. Pero sobre todo desempolvaron la verdadera actitud rockera y juerguista de quienes están contentos con el trabajo realizado y lo claman al aire sin complejos.

Marc, pura verborrea, se metía maracas en los huevos y provocaba eróticamente al público; Jes se volvía loco para subirse a la batería, llegar al micro y no perder el sombrero y las líneas de bajo por el camino. Víctor Valiente, nueva incorporación para la gira de la banda, se lo pasaba en grande en los solos de guitarra. Se dan las palmaditos de ‘Yo Soy La Crema’, totalmente prescindible, y suben de marcha con ‘Fascinado’. Encienden una velita recordando a los Beatles y presentan ‘Los Coches Aún No Vuelan’ amparándose en el sonido mantra de una tampura electrónica, que se queda luego a solas con Marc y una guitarra acústica para facturar una bellísima versión de ‘Por Tí’. También recuerdan a Bob Dylan en ‘No Sé Dibujar Un Perro’, sacando pancartas con la letra en un momento karaoke que bien podría ponerse un poco más de moda en este tipo de conciertos.

https://www.instagram.com/p/BOHe-T3hA78/?taken-by=bandalismonet

Pero lo mejor lo estaban reservando para el final, y empezaría a coger forma en las profundidades de ‘El Bosque’. Interludio dialógico, presentación de los componentes, solo freak de batería de Axel Pi y una outro prodigiosa que arrancaba con riffs de Led Zeppelin y se oscurecía en una explosión concreta de post-punk sobre las notas del tema homónimo de The Cure. ‘Un Día Más En La Vida’ volvía a enderezarlos en una carretera que terminarían de asaltar con el hitazo del nuevo trabajo, uno de esos clásicos instantáneos: ‘Carreteras Infinitas’. Los ecos de sus referencias alcanzaron cada rincón del Ochoymedio: Lori Meyers, Jota, el Primavera Sound, la Sala El Sol o la Joy Eslava, Egon Soda, Mi Capitán… para la coda final enumeran a la pléyade fundadora de la historia de nuestra música. A los héroes, y no precisamente los del silencio. Triana, Vainica, «La Movida», Gabinete Caligari, Alaska y Los Pegamoides, Radio Futura, «Graná» y Los PlanetasSupersubmarina. Guiños emocionales de los que siempre funcionan por apelación para cerrar un show principal en el que sorprendía la sobrecarga de temas recientes.

Para el bis reforzaron el cachondeo, hicieron la promo de sus camisetas customizables (lo de «el peor … del mundo» da mucho juego) y dejaron a Marc sumergirse entre el público a hombros del tour manager y al son de ‘Un Día De Mierda’. Tras ella, verdadera explosión con ‘El Incendio’, quizá el tema más mítico de la banda barcelonesa, y final apoteósico con explosión de confeti y final a coro en ‘Estáis Aquí’, que cerraba definitivamente un show con altibajos pero maduro en forma y concepto, meditado y perfectamente ejecutado. La única reflexión que me dejo es si otorgar a los temas de Sierra Y Canadá tanto protagonismo en el clímax es realmente conveniente. Supongo que son los irónicos avatares de ser «el peor grupo del mundo».

Puntuación de los lectores