El idílico festival gallego regresa a la Illa de Arousa con un cartel encabezado por Kaiser Chiefs y The Vaccines e incendiado por el fuego frío de Iceage
El pasado año os dimos buena cuenta de lo acontecido en el Atlantic Fest, uno de los más veteranos (se trata de la misma organización del mítico Festival Do Norte) y mejores festivales gallegos, que tiene lugar en uno de los paraísos naturales de la costa gallega: A Illa de Arousa.
Este año anunciaban cambio de fechas: 20, 21 y 22 de julio y obligados quizás por la proximidad con ese nuevo macrofestival compostelano, el O Son do Camiño que ha monopolizado el desfile de festivales en tierras gallegas.
Aún así, contra viento y marea, el Atlantic Fest ha conseguido reunir un cartel de lo más apetecible, con gusto y variedad, y que estos días cerraba su cartel.
The Vaccines, Kaiser Chiefs encabezan las confirmaciones internacionales, y a ellos unimos una banda que dará mucho que hablar. Un directo incendiario y que recupera (en parte) la esencia de esos primeros The Strokes o The Libertines pero con la marcialidad oscura del post punk más opresivo. Hablamos de los daneses Iceage, que llegan con ese explosivo Beyondless en el que cuentan con la colaboración de Sky Ferreira en ‘Pain Killer’.
La presencia de La Casa Azul, también con nuevo disco del que han adelantado ese impresionante single y vídeo, ‘Ataraxia’. Los de Guille Milkyway llenarán seguro el Atlantic de baile, desenfreno, sentimiento y reivindicación.
Las tendencias marcan también los line-up de los festivales y este es el caso del trap del granaíno Yung Beef. “Más cerca del punk que del hip hop, Yung Beef crea un lenguaje completamente nuevo con el que ya ha sacudido la escena hip-hop underground a nivel nacional y que ha recibido miles de aplausos de toda la escena”
Mención aparte a dos de los artistas del cartel: Iván Ferreiro y Rodrigo Amarante. El gallego sobradamente conocido y el brasileño son los autores de las BSO de dos de las series más seguidas relacionadas con el mundo de la droga, Fariña y Narcos… ¿coincidencia?
También estará presente el intimismo renovador folk de María Arnal y Marcel Bagés que actuarán en el auditorio de A Illa, además de bandas de las que os hemos hablado en repetidas ocasiones y que han crecido y se han consolidado de manera espectacular: La Plata, Los Nastys, los gallegos Presumido, que acaban de lanzar un nuevo pelotazo bajo el título de ‘Esa No Era Yo’, auténtica lección magistral de synth-pop en castellano.
Se suman a la veteranía indiscutible de Christina Rosenvinge y a una representación gallega que añade más enteros (si cabe) al cartel: el psico-tropicalismo de Bifannah, el folk-rock de quilates de Alto Volta, la juventud de las pontevedresas Mushu, el pop experimental de los ferrolanos Maneida, Ghost Beast, la charanga autotune de Esteban y Manuel, la más que recomendable electrónica orgánica y pop de Rayotaser (junto a Presumido y Músculo, forman la terna más importante de la electrónica adulterada gallega), el folk balcánico de Caxade y los vigueses Jay (que cuentan entre sus filas a Julián, guitarra de Disco Las Palmeras!).
Completan el cartel Eva A y Xabi B, Eva Amaral y Xabi Blanco “con sesiones en las que mezclan sin complejos temas de cualquier década y procedencia siempre que sirvan para agitar la pista”; los canarios Papaya, el trap de la santanderina D’Valentina y la chilena Soledad Vélez, insistiendo en esa gran presencia femenina en el cartel final de esta nueva edición del Atlantic Fest, que se ve reforzado por iniciativas destacadas como dar cabida a ese fantástico proyecto que es MIM (Mujeres en la Industria de la Música), que defiende y apoya la elevada presencia femenina en el cartel del festival.
Y por supuesto integrando perfectamente música y entorno, utilizando la isla como escenario natural y contando para este año con una ampliación de la zona gastronómica e impulsando todavía más esa faceta familiar del festi, con más zonas y actividades para los niños.
Sin duda una de las propuestas más interesantes, acogedoras, económicas y atractivas de todo el atracón festivalero estival, no solo gallego si no también nacional. Y lo decimos por propia experiencia.
Un festival familiar, cómodo, en un entorno impresionante, a precios más que asequibles, con una oferta gastronómica de excepción, sin masificación y un cartel de lo más acertado con gran representación de la escena gallega. En resumen, un lujo.