Un desplome en la zona del puerto durante la tercera jornada deja 400 heridos y sabor agridulce en una edición del O’Marisquiño que hasta entonces y pese a polémicas y beefs volaba bastante alto
Esta edición del Marisquiño arrancaba como una de las más ambiciosas ya que a las ya consagradas actividades de otras ediciones, como la zona de skate, los saltos de BMX, el freestyle de motocross, el descenso en mountain bike por la ciudad de Vigo. la competición de break dance o la zona de graffiti, se le sumaban dos actividades nuevas como son los e-Sports: Marisquiño y PlayStation apostaron por un espacio en donde el público podía jugar a diferentes juegos como FIFA 2018, Gran Turismo o el NBA entre otros; recordemos que la industria del videojuego ya supera en ingresos a otras tan potentes como el cine.
La otra modalidad muy esperada para todos que era el basket 3×3 de la FIBA, una competición a nivel mundial que contaba con el ex jugador de la NBA Robert Swith. El buen hacer del festival ha llevado a que algunas de estas categorías hayan alcanzado el nivel Gold o en el caso del skate sean pruebas clasificatorias para las próximas Olimpiadas de Tokio.
Así que un año más la zona del puerto de Vigo volvía a ser un hervidero de gente qué un año más disfrutaba de la mejor calidad de los deportes extremos, el arte urbano y la gastronomía que la zona de las Rías Baixas ofrece a los visitantes.
En el apartado musical, O Marisquiño volví a contar con tres escenarios en el puerto con estilos que cubrían desde la música electrónica al hardcore, con artistas como Pálida o la banda de hardcore viguesa We Ride. En la crónica del año pasado os contamos como el Marisquiño había cambiado de ubicación los conciertos y habían dejado de ser de pago como hace dos ediciones para pasar a ser gratuitos y celebrarse en la zona del puerto, al lado de las propias instalaciones de las actividades deportivas. En esa crónica también os contamos cómo poco a poco y en posteriores ediciones iría creciendo la calidad de los grupos llevados a esta parte del festival, que era cuestión de tiempo y paciencia ver cómo esto poco a poco volvía a crecer, así que todo parecía presagiar que esta edición iba anotarse el crecimiento respecto a la edición del año pasado.
Eso decía a gritos la contratación del artista Yung Beef como uno de los platos fuertes, pero como si de un mal de ojo se tratara las cosas empezaron a torcerse… el incidente que Yung Beef protagonizó en el Atlantic Fest, agrediendo a uno de los espectadores por haberle lanzado una cerveza encima, propició que O’Marisquiño cancelara su actuación en en apoyo al festival de su comunidad autónoma y a la vez anunciando que el gesto de Yung Beef iba en contra de los principios del festival. Esto trajo mucha repercusión y muchas críticas e hizo que otros artistas anunciados en el cartel cancelaran su actuación en apoyo al trapero granaíno. O Marisquiño solventó todo esto con la contratación de Rels B.
Todo parecía quedar zanjado y el festival de hecho se desarrolló los primeros días sin ningún tipo de incidente, pero la mala suerte volvió a hacer su aparición el último día del festival. Fue entonces cuando, en el escenario principal, parte del suelo del puerto se vino abajo haciendo que cientos de espectadores cayeran y muchos de ellos terminarán en el agua de la Ría de Vigo. Los datos oficiales hablan de más de 400 heridos aunque por suerte, pese a que alguno de ellos fue grave, no hubo que lamentar incidentes mayores. Auténtico desastre que hizo que no se pusiera un broche de oro a una gran edición. Con la información que se tiene hasta ahora, sabríamos que el suelo de madera se vino abajo ya que el el firme que lo sujetaba estaba en mal estado y hacía tiempo que no se revisada. Sin ser expertos en la materia entendemos que la máxima responsabilidad recae sobre quién concede el permiso para que en esa zona se haga un concierto, ya que el que concede el permiso es el experto que que sabe debe saber o informarse de cómo están las condiciones para que se realice el concierto. Es triste ver cómo el Ayuntamiento de Vigo y el puerto se pasan la pelota quitándose responsabilidades.
Y es triste que nosotros como medio tengamos que centrarnos más en esta noticia que en hablar de las secciones deportivas o musicales de este festival, pero entendemos que es algo que tiene que ver la luz para qué cosas así no se vuelvan a repetir. O Marisquiño es un festival que reúne en 3 días cientos de miles de personas y es uno de los festivales más importantes de Europa en su categoría. Así que esperamos que este incidente se solucione cuanto antes, se asuman responsabilidades y O Marisquiño se vuelva a levantar con más fuerza si es posible para que la próxima edición resulte la mejor hasta la fecha. Desde Bandalismo queremos mandar el apoyo para toda esa gente que se vio afectada en el incidente.
Os dejamos este motivo vídeo que la organización ha dedicado a todas las víctimas y asistentes de esta edición; por supuesto nosotros volveremos estar ahí el año que viene para disfrutar de este festival.