La Luz es una girl band de Seattle que hace surf rock del de verdad, del de los 60, con temas que encajarían perfectamente en la BSO de Pulp Fiction. Algo así como si las Shangri-Las se hubieran subido a la tabla.
Con dos largos en su haber, vienen por primera vez a España, con paradas en Barcelona, Madrid y San Sebastián, tal y como os contábamos en nuestra guía de conciertos recomendados de abril.
Charlamos con Shana Cleveland, guitarrista, cantante y líder del cuarteto de Seattle. Para ambientar la entrevista, podéis escuchar aquí It’s Alive, su último disco:
– La respuesta corta es que nos gustaba como sonaba.
– Vuestros discos han sido publicados por Burger Records y Hardly Art / Sub Pop, sellos que cuidan mucho a las bandas independientes y se preocupan por la calidad de la música. ¿Qué ha sido lo mejor de trabajar con estos sellos? En el futuro, ¿podríamos llegar a ver a La Luz dentro de una major?
– Trabajar con una gran discográfica no está entre mis objetivos, así que no. Hardly Art y Sub Pop, así como Burger Records y Suicide Squeeze y Water Wing Records, con los que también hemos trabajado, nos han ayudado muchísimo y nunca han tratado de cambiar la manera en la que hacíamos las cosas, así que estamos muy felices con ellos.
– No hay muchas bandas que puedan decir que han grabado un disco en un trailer park, como hicisteis con It’s Alive. ¿Dirías que eso ha contribuido al característico sonido retro y lo fi del álbum?
– Queríamos grabar con mi amigo Johnny Goss, que entonces vivía y trabajaba en un camping de caravanas. No estoy segura de si eso afectó de alguna manera un tanto inconsciente al sonido, pero sí puedo decir que el proceso fue muy fluido, con todo el mundo aportando ideas y colaborando. la intro de ‘Big Big Blood’, por ejemplo, fue algo que improvisamos allí, en el momento. No queríamos un disco con un sonido muy pulido, porque ese no es nuestro estilo.
– ¿Qué se siente al salir a la carretera de nuevo, después del grave accidente que sufristeis hace unos meses, al volver de un concierto en San Francisco?
– Pues a veces nos asusta un poco, pero no importa porque todas queríamos volver a girar.
– En tu opinión, ¿cuál es la banda o artista femenina más creativa y prometedora en estos momentos?
– Angel Olsen es genial. También me gustan Chastity Belt, una banda de Seattle. Y me encantan Grass Widow, aunque no sé si siguen activas.
– Y para ti, ¿cuál es la mejor girl band de la historia?
– Ahh, esa es difícil. No sé… Quizá The Supremes. O The Shangri Las. O The Trashwomen.
– ¿Cómo ha cambiado la escena de Seattle desde los 90?
– Bueno, hay un poco menos de franela. Aunque todavía hay bastante franela. Yo crecí en Michigan y no estuve en Seattle en los 90. Creo que toda la atención que trajo consigo el grunge hizo de Seattle un gran lugar para ser músico. Un montón de sellos indies empezaron por entonces y siguen sacando discos, como K y Sub Pop y Suicide Squeeze. La reputación de la ciudad trae a un montón de gente creativa, y de hecho es lo que me hizo decidirme por Seattle.
– Leí en una entrevista que os gustaba más Nirvana que Pearl Jam. Ahora que se han cumplido 20 años de la muerte de Kurt Cobain, ¿dirías que los medios han exagerado, o infravalorado, la importancia de Kurt Cobain y Nirvana en la música actual?
– Pues conozco a mucha gente que dice que se exagera con Kurt Cobain, y puedo llegar a comprender su punto de vista. Pero Kurt fue una estrella verdadera y genuina. A mí personalmente no me gustaría vivir en un mundo sin estrellas del rock.